El Last Planner System (LPS) es un enfoque de gestión de proyectos utilizado en la industria de la construcción y la ingeniería, desarrollado originalmente por Glenn Ballard y Greg Howell en la década de 1990. Su objetivo principal es mejorar la eficiencia y la confiabilidad en la planificación y ejecución de proyectos de construcción. El LPS se basa en la colaboración y la participación de todos los miembros del equipo de proyecto y se centra en la programación a corto plazo y la mejora continua.
El éxito del Last Planner System puede medirse en función de varios factores:
Cumplimiento de plazos
Uno de los objetivos principales del LPS es mejorar la puntualidad en la ejecución de tareas. El éxito se refleja en la capacidad del equipo para cumplir los plazos establecidos y evitar retrasos significativos.
Reducción de pérdidas y desperdicio
El LPS busca minimizar el desperdicio en el proceso de construcción, lo que puede traducirse en ahorros significativos en costos y tiempo. El éxito se refleja en la reducción de pérdidas y la optimización de recursos.
Mayor colaboración
El LPS fomenta la colaboración entre todos los miembros del equipo, incluidos los diseñadores, contratistas, subcontratistas y proveedores. El éxito se puede medir en la mejora de la comunicación y la cooperación entre estas partes.
Mejora continua
El LPS se basa en la retroalimentación constante y la mejora continua de los procesos. El éxito se refleja en la capacidad del equipo para identificar áreas de mejora y aplicar cambios efectivos.
Satisfacción del cliente
La entrega de proyectos dentro del presupuesto y el plazo acordados generalmente conduce a la satisfacción del cliente. El éxito se mide en la satisfacción del cliente y la posibilidad de obtener referencias y proyectos futuros.
Adopción exitosa
El LPS puede ser un cambio significativo en la forma en que se gestionan los proyectos de construcción. El éxito se refleja en la adopción exitosa del sistema por parte de todos los miembros del equipo y la integración en la cultura de la organización.
En resumen, el éxito del Last Planner System se relaciona con la capacidad de un equipo de proyecto para cumplir plazos, reducir desperdicio, mejorar la colaboración, buscar la mejora continua y satisfacer las necesidades del cliente. La medida del éxito puede variar según el proyecto y los objetivos específicos de la organización, pero estos son algunos de los indicadores clave.
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